
SLAM en robótica: aplicaciones en entornos industriales
El uso de la tecnología SLAM en robótica está cada vez más extendido. Gracias a ella, los vehículos y robots móviles autónomos son capaces de orientarse en entornos desconocidos sin una intervención humana directa, lo que confiere independencia para desempeñar sus tareas. Pero ¿qué es el sistema SLAM? Lo descubriremos a continuación junto con sus ventajas y aplicaciones.
¿Cómo se utiliza la tecnología SLAM en robótica?
El SLAM (del inglés simultaneous localization and mapping) es un conjunto de técnicas utilizadas por robots y vehículos autónomos que les permiten crear sus propios mapas de entornos desconocidos para orientarse. A fin de determinar su posición con exactitud, emplean los datos que les aportan sus sensores.
Por lo general, los sistemas SLAM se nutren de la información que recogen a través de escáneres LiDAR y la complementan con otros sensores como cámaras de profundidad. Seguidamente, un algoritmo dotado de inteligencia artificial se encarga de dar forma al mapa. La navegación SLAM se sirve de la cartografía y la IA para tomar decisiones inteligentes en entornos dinámicos como almacenes donde, a menudo, los robots móviles autónomos (AMR) comparten espacio con otros robots y humanos.
Los AMR utilizan el mapeo SLAM para orientarse. Estos vehículos inteligentes navegan con total autonomía por centros logísticos o plantas industriales para automatizar y flexibilizar el transporte interno de mercancías. Su uso dinamiza el flujo interno en múltiples operaciones de intralogística, potenciando la productividad y la eficiencia de los almacenes. Los robots detectan y evitan todo tipo de obstáculos, fijos o en movimiento, reajustando su recorrido en tiempo real.

Aplicaciones de SLAM en robótica
Emplear robots capaces de ubicarse mediante la tecnología SLAM aporta múltiples beneficios a las compañías que apuestan por la automatización industrial. Por ejemplo, al generar sus propios mapas, los AMR se adecuan perfectamente al layout de los almacenes, lo que evita tener que instalar balizas o depender de otros elementos.
Estas son algunas de las aplicaciones más comunes de la tecnología SLAM en robótica:
- Transporte interno de mercancías. Emplear robots móviles autónomos en almacenes permite transportar cargas entre dos puntos con total independencia, ya que estos dispositivos navegan libremente a partir de rutas generadas por un software que asigna la trayectoria idónea para cada tarea.
- Vehículos de conducción automatizada. Los coches autónomos conducen de forma segura gracias al SLAM mediante sensores LiDAR, cámaras y radares que les ayudan a percibir su entorno y crear un mapa detallado del mismo.
- Robots aspiradores. Las aspiradoras robóticas se sirven del SLAM para esquivar obstáculos o evitar caídas mientras limpian de manera eficiente habitaciones o, incluso, naves industriales. De este modo, aseguran una cobertura completa.
- Inspección y mantenimiento. Robots equipados con SLAM exploran infraestructuras complejas, como tuberías o centrales eléctricas, identificando anomalías.

Ejemplos de SLAM en robótica industrial
En entornos industriales, los AMR que se utilizan en los almacenes operan extremando la seguridad en entornos de gran complejidad que involucran personas, mercancías, sistemas de almacenaje y otras máquinas gracias a sensores y escáneres anticolisión. Sus movimientos son estables, fiables y se monitorizan mediante un software de gestión de flotas. Estos programas informáticos permiten, además, modificar los planos previamente creados con SLAM: después de que un robot haya mapeado una instalación, es posible editar esa primera versión del plano para indicar a la flota detalles como qué zonas tiene prohibidas o qué lugares son puestos de trabajo con los que interactuar.
En definitiva, los AMR son dispositivos muy versátiles que se integran de forma sencilla, ya que no requieren aplicar modificaciones a las infraestructuras existentes. Sus flotas pueden expandirse fácilmente con la introducción de nuevos robots, por lo que son una herramienta ideal para ajustarse al crecimiento operacional de las empresas o a picos de demanda estacionales.
La tecnología SLAM en robótica en 5 preguntas
¿Cómo funciona la tecnología SLAM en robótica?
La tecnología SLAM aplicada a la robótica permite a robots o vehículos autónomos (como los AMR) crear mapas de entornos desconocidos utilizando datos de sensores como LiDAR y cámaras, guiados por algoritmos de IA.
¿Qué beneficios aporta el SLAM a la robótica?
En robótica, SLAM permite a los robots crear mapas de su entorno y ubicarse en ellos al mismo tiempo. Esto les brinda autonomía, navegación precisa, evita colisiones y facilita tareas complejas como la exploración y manipulación en ambientes desconocidos.
¿Qué tipos de sistemas SLAM existen?
Existen varios tipos de SLAM en robótica, siendo los más comunes el SLAM visual, que usa cámaras para identificar puntos en imágenes, y el SLAM basado en LiDAR, que emplea láseres para obtener nubes de puntos.
¿Ejemplos de aplicación del SLAM en robótica?
En almacenes, los AMR incorporan sensores SLAM que utilizan para navegar de forma segura en entornos complejos, con movimientos monitorizados y planos editables para mejorar la eficiencia operativa.
¿Cómo sacar partido de la tecnología SLAM?
Los AMR, que aprovechan la tecnología SLAM para una fácil integración y escalabilidad sin modificaciones en la infraestructura, optimizan las operaciones y se adaptan al crecimiento y la demanda.