Stock Uno: logística promocional y gestión en el punto de venta

28 mar 2014

Stock Uno dispone de unas instalaciones muy ágiles para resolver dos campos de la logística realmente complicados: la operativa necesaria para llevar a cabo una promoción y su gestión y marketing en el punto de venta. La solución engloba un almacén de estanterías de paletización distribuidas en zonas dedicadas a cada proceso concreto, el empleo de la radiofrecuencia que hace posible la trazabilidad o una red de 400 merchandisers repartidos entre los establecimientos que trabajan con comunicadores autónomos para la respuesta inmediata a la transmisión de instrucciones por parte del cliente.
 

La historia de Stock Uno es muy reciente, ya que fue en 1994 cuando se puso en marcha esta compañía con sede en Madrid. Sin embargo, en muy poco tiempo ya abarca un campo de actuación que cubre todo el territorio nacional y Portugal haciéndose un hueco en el sector al especializarse en logística promocional y en marketing en el punto de venta. Tal como afirma José María Morote, director de marketing y desarrollo de la compañía, “estos servicios responden al problema de coordinación existente entre la implantación del producto y su promoción: cuando uno está en la tienda, el otro no ha llegado o viceversa”. De este modo, desde Stock Uno se lleva a cabo todo el recorrido necesario para ponerla en funcionamiento, desde la salida de fábrica de los productos, el montaje del expositor, su mantenimiento en el establecimiento y hasta la retirada una vez concluye. Igualmente, se hace cargo de los trabajos de posicionamiento, reposición y atención de los lineales, control de roturas de stocks y emisión de pedidos, entre otras múltiples tareas.

Con el fin de cumplir con todas estas operaciones en los puntos de venta, la compañía dispone de una red de 400 merchandisers que se reparten entre hipermercados, supermercados, centros comerciales, etc. de España y Portugal. Estos empleados pueden estar en cada centro con carácter permanente, unas determinadas horas o rotar para hacer actividades puntuales. Cada uno dispone de un comunicador autónomo Nokia 9110, con el que a través de un sistema de desarrollo propio es posible conocer on-line la actividad que está desempeñando en la tienda y optimizar su rendimiento. También facilita la transmisión instantánea de instrucciones y su respuesta inmediata. Esto supone una ventaja competitiva para los clientes porque pueden controlar su escenario de ventas para actuar en consecuencia en todo el territorio nacional y en Portugal sin la necesidad de moverse del despacho.

Una actividad más en la que Stock Uno se ha especializado es la logística domiciliaria, es decir, en la preparación de los pedidos y en la distribución de cualquier tipo de producto al consumidor final. Un servicio que se apoya con un sistema informático de control, para visualizar la trazabilidad del artículo, además de con un Contact Center (centro de atención telefónica) que atiende cualquier consulta de preventa o postventa.

En cuanto a los sectores que abarca Stock Uno tanto en logística promocional como en el área domiciliaria, estos comprenden todos los relativos a productos que no sean alimentos: ocio y entretenimiento, DVD, discos, videojuegos, libros, perfumería, bazar, deportes, informática, etc. Hay clientes en los que el flujo de trabajo es diario y otros que solicitan el servicio logístico o la gestión en los puntos de venta puntualmente o varias veces al año. Todo depende de la estrategia promocional de sus departamentos de marketing. Esto quiere decir también que las referencias que gestiona el operador varían hasta en 24 horas, porque casi siempre se trata de artículos nuevos. Aproximadamente, se trabaja con 400 ó 500 por cliente, de las que 200 son referencias vivas. Aunque hay ciertas compañías como las de telefonía que aportan un catálogo de alrededor de 3.000 unidades distintas.

Más capacidad: más negocio

El negocio de la empresa está creciendo y una prueba de ello es la reciente inauguración de su nuevo almacén en la localidad madrileña de Rivas Vaciamadrid. Con anterioridad, Stock Uno contaba con tres naves de unos 6 m de altura que sumaban una superficie total de 5.000 m2 habilitados para un total de 3.000 paletas. Ahora, dispone de unas dependencias de 8.200 m2, 12 m de altura y una capacidad para 10.000 paletas, en donde operan cinco carretillas elevadoras convencionales y dos retráctiles.

Los productos que aquí se manipulan suelen ser de alto valor económico, por lo que las instalaciones se han acondicionado con medidas excepcionales de seguridad como un control de acceso al recinto, un arco de seguridad detector de metales en la puerta de entrada y salida del almacén o cámaras interiores que graban las 24 horas del día.
Por otra parte, los diferentes formatos de las referencias y las distintas actividades logísticas que se llevan a cabo han hecho que el centro se estructure de la siguiente forma:
 

  • A.- Área de recepción y expedición con seis muelles de carga y descarga para camiones y tres rampas para el acceso de vehículos de pequeño tamaño.
  • B.- Área de reserva para ubicar el stock tanto de los clientes que solicitan los servicios de logística promocional como domiciliaria. Esta zona consta de 14 estanterías dobles de paletización convencional más dos simples organizadas en dos grupos separados por un pasillo central. Cada una se compone de 16 módulos y seis niveles de carga dejando el último para ubicar armarios, expositores y displays de grandes dimensiones.
  • C.- Área de seguridad destinada a los artículos de mayor valor con dos grupos de cuatro estanterías simples (de paletización convencional) de cinco módulos cada una y cuatro niveles de carga.
  • D.- Área de devoluciones con tres mesas de trabajo y ubicada entre los dos grupos de estanterías del área de seguridad.
  • E.- Área de picking de material promocional o PLV (Productos para el Lineal de Venta) o no facturable (displays, expositores, pósteres, gorras, carteles, bolígrafos, etc.). Aquí se dejan preparadas las mercancías que después servirán para confeccionar los pedidos. Se compone de dos estanterías dobles —ubicadas a continuación del área de reserva— con 21 módulos cada una y cuatro niveles de carga, de los cuales el primero tiene una altura de 2,30 m.
  • F.- Área de producción PLV con seis mesas de trabajo donde se ultima la preparación de las expediciones de la operativa de logística promocional.
  • G.- Área de producción “domicilio” o última fase de preparación de pedidos de los artículos para entregar a domicilio. A partir de todas las referencias que comprenden el conjunto de pedidos diarios de un cliente que solicita el servicio de logística domiciliaria se prepara y documenta cada expedición. Para ello se han instalado seis mesas de trabajo, una cinta de rodillos de 60 m de largo, varios puntos de lectura y comprobación, además de una máquina de retractilado.
  • H.- Área de picking “domicilio” con dos estanterías dobles de 21 módulos cada una y una simple adosada a la pared de 28 módulos. En los cuatro niveles de carga se colocan las paletas con las unidades que después se emplearán para preparar los pedidos de la logística domiciliaria.
 

Cabe resaltar que todas las estanterías instaladas son de paletización convencional con módulos capacitados para tres paletas por hueco. Un dato también relevante es que se han aprovechado las estanterías de las antiguas naves de Stock Uno, que aunque de menor altura que las nuevas, su capacidad es suficiente para la zona de picking a domicilio y de picking promocional. También es característico de este almacén la alta rotación de las referencias. Incluso un día concreto la instalación puede estar al cien por cien de su capacidad para vaciarse casi completamente a las 24 horas.

Recepción, picking y expedición
 

A diario, se pueden recepcionar en estas instalaciones hasta seis camiones a la vez. Cuando los operarios disponen de la documentación de la mercancía recibida y conocen el cliente al que pertenece lo ponen en conocimiento del departamento de atención al cliente para que a su vez comunique la llegada. De este modo, todas las partes implicadas saben en qué situación se encuentra cada operativa en todo momento.

Después, se procede a realizar un chequeo que dependiendo del tipo de producto será más o menos exhaustivo. Se verifica que coincidan los albaranes de entrada con la mercancía física. Tal vez sea suficiente con pesar cada paleta o caja recibida, en cambio, si se trata de productos de telefonía móvil será necesario hacer una comprobación unitaria de cada referencia.

El almacén se gestiona a partir de un sistema informático, sin embargo, la orden de ubicación de las unidades recién llegadas la emite el responsable del centro, que al tener conocimiento de las operaciones previstas elegirá una zona u otra. Lo que siempre se respeta es la colocación conjunta de todas las referencias que corresponden a un mismo cliente y la distribución más cercana a la cabecera de las estanterías de las unidades de mayor rotación. Además, se evita utilizar los primeros niveles de carga para los productos de alto valor económico, por lo que quedan libres para, por ejemplo, los embalajes. A partir de aquí todos los movimientos se realizarán empleando pistolas de radiofrecuencia de modo que nunca se pierde la trazabilidad de cada artículo.

Por la mañana se reciben unos ficheros con una media de mil pedidos diarios, que a su vez generan unos listados por cliente que comprenden el total de unidades por referencia. A continuación, los encargados de la maquinaria de manutención recogen estos artículos de las posiciones de las estanterías de la zona de picking “domicilio” o PLV. Después depositan el conjunto de la mercancía en el área de producción o preparación que corresponda. En estas líneas otros operarios se encargan de confeccionar los paquetes, de emitir la documentación de entrega y adjuntarla y, tras realizar una última comprobación de calidad, introducen cada caja en una jaula determinada dependiendo del domicilio de envío. A lo largo del día se van llenando estas jaulas hasta que por la tarde las agencias de transporte las recogen y dejan a su vez otras vacías para poder iniciar el picking al día siguiente.

Otra verificación más de que toda la operativa ha sido correcta es que al final de la jornada no puede sobrar ni faltar ningún artículo de estas mesas de preparación de pedidos.

Los artículos de gran volumen como los expositores, armarios o displays se depositan directamente en la zona expediciones con su documentación correspondiente. Las agencias recogen estas cargas junto a las jaulas.

Stock Uno también se hace cargo de comprobar que las entregas se han llevado a cabo sin problemas. Los envíos a domicilio, por ejemplo, de teléfonos móviles, incluso requieren el pago contra reembolso de cuya gestión se responsabiliza el operador. En cuanto a las entregas de los productos que forman parte de una promoción, si el cliente ha solicitado el servicio, podrá encargar a uno de los merchandisers de la red que realice su recepción y, si también se ha solicitado, haga la gestión completa en el punto de venta. De esta forma, Stock Uno ofrece la posibilidad de cerrar todo el ciclo de la logística que rodea a una promoción.

En conclusión, “independientemente del servicio que solicite el cliente, sólo una operación puntual o todo el conjunto, hemos desarrollado procesos estándares de trabajo que a su vez se van amoldando a cada necesidad”, puntualiza José Gómez, director de operaciones de Stock Uno. Cada cliente, además, tiene asignado un equipo de trabajo en el almacén que también rota, dependiendo de los volúmenes de producción.

Por último, con el objetivo permanente de anticiparse a la demanda la compañía ha incorporado un nuevo ERP (software estándar de gestión) que puede poner a disposición de sus clientes. “Es decir, le aportamos todas las herramientas informáticas (hardware y software) que necesita para gestionar su operativa de modo que pueda hacer las órdenes de compra a los proveedores, realizar la recepción de los productos, controlar los envíos y el stock, facturar o gestionar el cobro. Le ofrecemos el espacio, el sistema, la gestión en el punto de venta y el servicio postventa”, concluye José Gómez, director de operaciones de Stock Uno.
 


Ficha técnica del almacén de Stock Uno:
Superficie total: 8.200 m2
Capacidad: 10.000 paletas
Longitud de los módulos: 2.700 mm
Nº de paletas por hueco: 3
Área de reserva
Nº de estanterías: 30
Nº de módulos: 16
Nº de niveles de carga: 6
Área de seguridad
Nº de estanterías: 4
Nº de módulos: 5
Nº de niveles de carga: 4
Área de picking de material promocional o PLV
Nº de estanterías: 4
Nº de módulos: 21
Nº de niveles de carga: 4
Área de picking “domicilio” Nº de estanterías: 5
Nº de módulos: 21 y 28
Nº de niveles de carga: 4