Nuevo silo automático para los productos de alta rotación de Caprabo

28 mar 2014

El grupo Caprabo está inmerso en un ambicioso plan de expansión nacional que le ha llevado a abrir más de 60 nuevas tiendas en el último año. Para afrontar con garantías el reto logístico de servir diariamente a sus establecimientos catalanes, la compañía ha centralizado en un silo automático las 400 referencias de mayor rotación.

El crecimiento de Caprabo en los últimos seis años ha sido espectacular. Sobre todo en Cataluña, donde es difícil abrir nuevos supermercados -al ritmo que lo está haciendo- sin caer en el canibalismo. Esta progresión impone cautela a la hora de realizar cualquier balance de la evolución de la compañía, pues corre el riesgo de quedar rápidamente obsoleto. En cualquier caso, Caprabo cerró 2001 controlando 375 puntos de venta en el territorio nacional, 268 de los cuales se encuentran en la Comunidad catalana.

Durante el pasado año, el grupo abrió más de 60 nuevas tiendas (por encima de las previsiones) y puso en marcha el supermercado on-line Capraboacasa.com. Y en 2002, la cadena de distribución, que actualmente opera en Cataluña, Baleares, Madrid, las dos Castillas, Extremadura, Aragón y en la Comunidad Valenciana, se muestra dispuesta a mantener un fuerte ritmo de crecimiento.

Este escenario ha puesto a prueba la logística de Caprabo en Cataluña, donde hasta el año 2001 contaba con una única plataforma logística. Los dos almacenes de la calle Ciències en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), con capacidad conjunta para 24.700 paletas, se habían quedado pequeños para absorber el aumento del volumen de stocks y del flujo de mercancías que comportaba la apertura de nuevos establecimientos. Para prevenir los cuellos de botella que se advertían, era imperativo incrementar también la infraestructura logística.

La empresa no quiso abandonar sus instalaciones de L'Hospitalet, porque están situadas de forma estratégica cerca del centro de gravedad de sus establecimientos y las distancias que recorren los camiones son las mínimas posibles. Sin embargo, ante la imposibilidad de ampliar la plataforma logística, Caprabo decidió crecer en otro emplazamiento lo suficientemente cercano a las tiendas. Finalmente se optó por la localidad de Abrera (Barcelona), que ofrece un importante nudo de comunicaciones y facilita la distribución a las cuatro provincias catalanas. En la decisión se tuvieron en cuenta -una vez más- las previsiones, que para 2001 reflejaban un importante crecimiento del número de puntos de venta fuera del área metropolitana de Barcelona.

Productos estrella
 

En cuanto al funcionamiento de la nueva plataforma, la compañía contemplaba dos opciones. La primera pasaba por replicar allí todas las referencias de L'Hospitalet, de manera que desde esta última localidad se sirviese a todas las tiendas del área metropolitana y Abrera se quedase como polo de distribución para el resto de Cataluña. Según el director de aprovisionamiento y logística de Caprabo, Francesc Miret, "en el ámbito operativo quizá fuera esa la mejor opción, pero hubiésemos necesitado tantos puntos de picking como productos servimos. Eso requiere muchos metros cuadrados y, consecuentemente, una inversión inicial muy elevada".

La segunda opción, la que finalmente se eligió, contemplaba un silo de alta rotación en el que sólo se gestionarían los productos más vendidos. La decisión ha supuesto llevar a Abrera 400 referencias que mueven el 50% del volumen de mercancía transportado por Caprabo. La cadena de distribución catalana dispone de unas 10.000 referencias de producto seco, de las que aproximadamente 5.000 se encuentran centralizadas en sus instalaciones. El resto lo sirven los proveedores directamente a las tiendas. "Nos dimos cuenta de que, con sólo trabajar con las 400 referencias en este otro almacén, bajarían notablemente tanto los flujos como el stock en L'Hospitalet y solucionaríamos, de este modo, los dos problemas que se habían planteado", subraya Miret.

Al no establecer a priori una división geográfica del área de influencia de los dos centros logísticos, todas las tiendas reciben indistintamente producto seco tanto de L'Hospitalet como de Abrera. No obstante, como existen algunos establecimientos pequeños, que quizá no recepcionan más de diez paletas diarias, para evitar que los camiones viajen semivacíos se agrupan en sus envíos mercancías procedentes de ambas plataformas. El grupaje de cargas se realiza, sobre todo, para aprovisionar las tiendas más alejadas. De esta manera, para servir a un punto de venta situado en Sant Carles de la Ràpita (población del sur de Tarragona), Caprabo lleva a cabo un servicio de transporte lanzadera desde Ciències hasta Abrera (ambas instalaciones distan 30 km la una de la otra) y, desde allí, sale un único envío con productos de las dos plantas.

En otras ocasiones, se realizan rutas combinadas, en las que un único camión que parte de Abrera, por ejemplo, sirve a varias tiendas relativamente cercanas al centro. Todo ello sin perjuicio del cumplimiento de los plazos de entrega: cada punto tiene asignado un horario para emitir y recibir pedidos. "Aprovechamos sinergias, porque transportar aire es lo más caro que hay. Pero nuestro nivel de cumplimiento está por encima del 90%", asegura Miret. Las tiendas Caprabo pueden recepcionar hasta ocho camiones diarios.

Un almacén para el futuro
 

Una vez decididos los productos que debían trasladarse a Abrera, la empresa se decantó por un sistema automático como solución de almacenaje más idónea. El silo de alta rotación, que entró en funcionamiento a finales del año pasado, se encuentra dentro de unas instalaciones de 30.000 m2 donde, además, se han instalado seis líneas automatizadas de preparación de pedidos. También se ha habilitado una zona con tres cámaras frigoríficas para el picking de la fruta y la verdura. El centro se está preparando para asumir en el futuro la logística de distribución de estos alimentos frescos, que en 2003 implicará el movimiento de 1.300 paletas diarias, aproximadamente.

El almacén automático tiene una longitud de 95 m y una altura que casi alcanza los 27 m. Cuenta con ocho pasillos servidos por otros tantos transelevadores y 12 niveles de carga, cinco de los cuales se encuentran bajo el nivel del suelo. Caprabo lo construyó teniendo presentes los planes de expansión para los próximos años, de modo que fuera capaz de atender el doble del volumen de negocio que la compañía experimentó en 2000. Asimismo, se añadió un coeficiente de seguridad sobre las previsiones de crecimiento, para asegurar que la instalación pudiera absorber sin problemas nuevos stocks. Por este motivo, aunque la ampliación del número de tiendas en el último año ha sido considerable, Miret ve "muy lejana la congestión de este almacén, porque tiene capacidad para 14.000 paletas y, con los volúmenes actuales, las 400 primeras referencias ocupan 9.000 huecos".

Entre los productos con mayor volumen de ventas se encuentran los detergentes, los aceites, los refrescos y el papel higiénico y de cocina. Todas estas líneas de alta rotación tienen una gestión automatizada, y, tal como llegan las paletas, se introducen en el punto de inducción del silo, situado en su cabecera. Sin embargo, no se consideró oportuno almacenar en él ningún producto de baja rotación, ya que, como señala el responsable de logística de la compañía, "aunque la automatización aumenta la productividad, permite menos flexibilidad". En total, de Abrera podrían salir la mitad de las 6.000 paletas que Caprabo espera mover en 2003.

Picking automatizado
 

El sistema de reaprovisionamiento del picking en la instalación también es automático. El lateral del silo cuenta con dos puntos de salida para las paletas, que son conducidas por sendas cintas de rodillos hasta una zona que dispone de seis lanzaderas. Allí unos elevadores se encargan de depositar la carga en unos carros filoguiados, que se desplazan a nivel del suelo a lo largo de seis pasillos con 40 racks (estanterías dinámicas de gravedad) a cada lado. Los carros dejan las paletas completas sobre estas estanterías -que tienen capacidad para tres o cuatro unidades- y ruedan hasta el extremo, donde los operarios realizan el picking de los productos utilizando un sistema de radiofrecuencia.

Las paletas también pueden salir completas del silo. En ese caso, un séptimo elevador es el que las deposita frente a los muelles de carga. Operarios con transpaletas se encargan entonces de posicionarlas frente a cualquiera de las 50 puertas de salida de mercancía.

Plan director de infraestructuras
 

Caprabo está llevando a cabo una revisión de todos sus procesos de aprovisionamiento con el objetivo de reducir stocks y mejorar el servicio a las tiendas. Cuando el nuevo sistema esté definido, la compañía espera sacarle aún más partido al nuevo almacén automático.

La empresa catalana está diseñando un plan director de infraestructuras para concretar la estrategia logística de los próximos cuatro años y determinar futuras necesidades. "Todas las empresas de distribución -afirma Miret- tienen claramente delimitadas las categorías comerciales (detergentes, perfumería, alimentación, etc.). Pero lo más difícil es establecer las categorías logísticas: aquellas que, por diversos factores, deben ser gestionadas por canales de distribución diferenciados o bien tratadas con sistemas de almacenaje o de picking distintos". Esta iniciativa pretende hallar los procesos óptimos para cada tipología de producto. Para ello, lo primero que está llevando a cabo Caprabo es la definición de esas categorías y el inventario de las infraestructuras logísticas disponibles para la aplicación de un modelo de servicio a las tiendas para cada una de esas referencias.

La empresa está examinando las infraestructuras existentes en Cataluña, Madrid y Baleares e investigando nuevas tecnologías y sistemas para ver qué cambios se pueden introducir. "Ahora -asegura Miret- estamos analizando cuál es el límite operacional del nuevo almacén en cuanto a superficie, flujos de mercancías y picking de productos. Se trata de plantear cuál será el siguiente paso cuando aquí estemos funcionando al cien por cien".

En Madrid, donde el grupo controla más de medio centenar de puntos de venta, Caprabo cuenta con una plataforma logística en la localidad de Valdemoro. Una de las prioridades en los planes de expansión de la compañía es el crecimiento en la capital, donde está presente desde hace seis años, cuando adquirió los once establecimientos de la cadena Alfaro. Por su parte, en Baleares el grupo de distribución dispone de un centro logístico en Palma de Mallorca.

Mejoras en la cadena de suministro
 

Caprabo está trabajando igualmente en la mejora de su cadena de suministro para, entre otras cuestiones, aumentar su capacidad y poder continuar creciendo en número de puntos de venta. En este proyecto va de la mano con i2 Technologies, proveedor de soluciones para la gestión dinámica de la cadena de valor, y PricewaterhouseCoopers Consulting. La compañía pretende conocer el stock de cada referencia en todas sus tiendas y ser capaz, a la par, de hacer una previsión de las ventas. El objetivo es poder planificar el aprovisionamiento de los establecimientos: "La suma de la previsión de necesidades de suministro para cada referencia se corresponde con la demanda que se hará a los almacenes, lo cual permite predecir los pedidos a los proveedores", constata Miret. "Si tienes visibilidad sobre toda la cadena de suministro -continúa-, podrás planificarla mejor y lograr que las empresas suministradoras sean más eficientes".

Con esta gestión integrada de la cadena de suministro será posible prever y preparar con anticipación los envíos a los puntos de venta, sin tener más stock del estrictamente necesario. Este propósito es muy importante para una empresa que, como Caprabo, trabaja con 40.000 referencias.

Además del plan director de infraestructuras y del proyecto de mejora de la cadena de aprovisionamiento, la empresa de distribución se ha marcado un tercer reto logístico: la centralización de referencias, una de las claves de su estrategia para los próximos años. Actualmente el grupo tiene en stock 5.000 productos secos, pero espera aumentar ese número en 2.500 artículos más. Sin embargo, esta decisión no guarda relación con la política de expansión de Caprabo, sino que tiene que ver con una reestructuración interna de los procesos.

Capraboacasa.com
 

A través de la web capraboacasa.com, la compañía catalana ofrece a sus clientes la posibilidad de realizar su compra a través de Internet y recibirla a domicilio. El gran reto logístico de este servicio es la distribución capilar. La clave, según Francesc Miret, director de aprovisionamiento y logística de Caprabo, está en dotarse de un sistema inteligente que permita gestionar en todo momento la capacidad de respuesta: "Tan importante como cumplir con lo que pide el cliente es poder decirle de qué somos capaces. Por eso hemos dotado de inteligencia al sistema de Capraboacasa, que advierte al usuario si podremos servirle lo que ha pedido y en el tramo horario que ha solicitado. De esta manera, las expectativas siempre se ven satisfechas; es un servicio fiable".

Si una referencia no está disponible, la tienda virtual propone escoger un artículo sustitutivo, con lo que soluciona otro de los problemas de la compra no presencial. En el caso de que el cliente admita un producto alternativo, el sistema informático indica al operario que debe realizar el picking de esta compra on-line cuál es la referencia que más se ajusta a la petición original.

La distribución de los pedidos realizados a través de la Red la efectúa una flota de 60 vehículos, especialmente diseñados para Caprabo, que cuentan con cajas a tres temperaturas: ambiente, refrigerado y congelado. Estos camiones cubren hasta la fecha el 98% de la población catalana, la totalidad de la de Palma de Mallorca y gran parte de la madrileña. El usuario de la web también tiene la opción de pasar a buscar su compra por una de las 23 tiendas habilitadas para esta función. Se trata de un servicio pensado para personas que no conocen con exactitud cuándo van a estar en casa y quieren tener la compra lista y a su disposición para recogerla en el momento que más les convenga. "Una vez más -aclara Miret-, lo que vendemos con este servicio es tiempo: ofrecemos una horquilla de dos horas para la entrega de productos a domicilio y esta otra opción para aquellos clientes que no quieren ser esclavos de un horario".

Capraboacasa.com facturó en su primer año de existencia 12 millones de euros, la mayoría en Cataluña. En total, el grupo alcanzó unas ventas en 2001 de unos 1.450 millones de euros.

Ficha técnica del silo automático de Caprabo



Longitud 95.340 mm Anchura 37.660 mm Altura26.841 mm Nº de estanterías 16 Nº de módulos 37 Longitud del módulo 2.212,5 mm Niveles de carga12 Nº de pasillos8 Anchura del pasillo 1,85 m Nº de paletas por hueco 2 Nº de transelevadores 8 Capacidad14.208 paletas Unidad de cargapaleta de 800x1.200 mm con carga desbordante de 900x1.300 mm Carga máxima por paleta1.200 kg