Servicios web: hacia una nueva era de Internet

01 jul 2002

Internet hoy, tras finalizar 2001, es ante todo un medio de comunicación de contenidos y una base de meritorias iniciativas, aunque puntuales, de comercio electrónico. Sin embargo, algo se está moviendo silenciosa y discretamente para que algún día no muy lejano la Red se convierta en la piedra angular de todos los sistemas de información sin excepción.

No es ningún secreto que el desarrollo de aplicaciones informáticas para la empresa sigue siendo una tarea compleja y costosa. También es cierto que se ha avanzado mucho desde aquellos tiempos en los que cualquier necesidad nueva se programaba prácticamente desde cero.

Hoy en día existen numerosas ayudas para construir una aplicación empresarial a diferentes niveles, desde sistemas de bases de datos y herramientas de desarrollo avanzadas, hasta paquetes completos de ERP (software estándar de gestión, en sus siglas en inglés) que tan sólo es necesario adaptar a cada caso concreto.

Sin embargo, el entorno heterogéneo de sistemas de información de una compañía, donde se pueden mezclar desarrollos a medida con paquetes estándar de ofimática y gestión, conlleva necesariamente una cierta dificultad en la integración de nuevas funcionalidades.

El objetivo o el “Santo Grial” de los sistemas de información sería que ante una necesidad de una empresa, y cualesquiera que fuesen sus aplicaciones actuales, existiese una solución adecuada y a un precio razonable, que a su vez, pudiese implementarse de forma rápida y sencilla. Algo parecido a lo que en estos últimos años se ha conseguido para la puesta en funcionamiento de un periférico en Windows, una tecnología conocida como Plug&Play o “conectar y funcionar”.

En esta línea ha estado trabajando, muy especialmente, la industria del software desde que la popularización de Internet ha supuesto un gran salto cualitativo para hacer realidad estas aplicaciones de implementación rápida. Los primeros servicios de aplicación ofrecidos a través de Internet fueron los paquetes de ofimática y trabajo en grupo y, en segundo lugar, las aplicaciones completas de gestión empresarial, tales como contabilidad, facturación, fuerza de ventas, atención a clientes, etc.

Estas propuestas, cuando se ofrecen con las debidas garantías de disponibilidad del servicio y seguridad de los datos, son muy interesantes para empresas pequeñas y medianas o como soluciones departamentales para grandes compañías, aunque pueden no ser suficientes en aquellas ocasiones en las que se trata de realizar funciones concretas en entornos complejos de aplicaciones ya existentes.

La visión de la industria, para la tercera generación de servicios de aplicación a través de Internet, es la de un catálogo de componentes funcionales, perfectamente documentados, que pueden invocarse de forma sencilla desde cualquier aplicación conectada a la Red. Bajo esta propuesta, construir una aplicación en un futuro próximo será como juntar las piezas de un mecano de forma intuitiva, sin que sea necesario conocer los detalles de su estructura ni su funcionamiento interno, sino únicamente su función y su conectividad con las demás.

Para conseguir que este objetivo llegue a ser una realidad es esencial que la industria trabaje sobre los mismos estándares, ya que de lo contrario los “mecanos” de servicios web que se podrían encontrar en el mercado serían todos diferentes e incompatibles entre sí, lo que obviamente limitaría las posibilidades de esta tecnología. En consecuencia, se han definido unos estándares aceptados mundialmente y que se describen a continuación:
 

  • -UDDI (Universal Description, Discovery & Integration): es una tecnología que permite a las empresas localizar y transaccionar unas con otras, rápida y sencillamente (consultar la página web www.uddi.org).
     
  • -SOAP (Simple Object Access Protocol): es un protocolo de características muy simples, basado en XML, para el intercambio de información en un entorno descentralizado y distribuido, como es el caso de Internet (consultar la dirección http://www.w3.org/tr/SOAP/).
     
  • -WSDL (Web Services Description Language) es un formato en XML que describe un servicio web (consultar la dirección http://www.w3.org/tr/WSDL.html).
     

Para entender cómo funcionan estos protocolos se puede hacer una comparación con una llamada telefónica: el lenguaje XML representa la conversación, SOAP describe el procedimiento para llamar y UDDI la guía de teléfonos. WSDL se refiere el tema de la conversación y cómo se puede participar en ella.

Los principales servicios web hoy en día disponibles pueden encontrarse en las siguientes direcciones de páginas web: http://www.xmethods.com, http://www.salcentral.com o http://www.xml-webservices.net.


Aunque esta lista de servicios web no es todavía muy extensa y se limita a funciones sencillas, la total implicación en el tema de Microsoft, IBM, HP y Sun Microsistems, entre otros, permite prever un fuerte crecimiento de la oferta en los próximos años.

Servicios web para la empresa

La creciente oferta de servicios web hace pronosticar un cambio radical en la forma de programar aplicaciones empresariales en los siguientes ejercicios: en vez de desarrollarlas de principio a fin con medios propios o recurrir a un ERP, al que le pueden faltar o sobrar funcionalidades, será posible incorporar funciones complejas y específicas, como la integración de la compra-venta en marketplaces o el análisis del comportamiento del cliente, todo ello de forma sencilla y pagando únicamente por la utilización del servicio o aplicación utilizada.

Algunas nuevas empresas están empezando a ofrecer sus propias tecnologías alrededor de las de servicios web, que permiten la realización rápida y segura de aplicaciones pensadas para operar sobre Internet. Es el caso de Kenamea (http://www.kenamea.com), que aporta una plataforma en la que pueden desarrollarse sobre la Red aplicaciones con fuertes requerimientos de intercambio de información en tiempo real.
 

También sin programación

Según palabras de Dave Spicer, fundador de Flamenco Networks, "“las empresas pueden conectarse a nuestros servicios sin escribir una sola línea de programación. Somos como el teléfono, pero en servicios web"”.

La industria está haciendo un gran esfuerzo para que estos servicios web sean muy simples de utilizar y crear, pero aún así, implementarlos requiere un cierto esfuerzo de programación. Por ese motivo, empresas como Flamenco Networks, Grand Central y Kenamea, entre otras, han desarrollado una oferta de servicios que no precisa de programación alguna.

Grand Central dispone de una gama totalmente configurable sin programación que permite a los interlocutores conectados a la Red intercambiar información de forma simple. Craig Donato, Chief Executive Office de esta compañía, declaró para InternetWeek.com que "“los sistemas B2B y las redes de valor añadido (VAN) para EDI (intercambio electrónico de datos) requieren habitualmente la integración de un hardware y un software específico, que debe configurase expresamente mediante un proceso caro y lento"”.

La visión de Grand Central es aprovechar la accesibilidad de Internet en las empresas, a fin de proporcionar una conectividad que permita un intercambio electrónico de datos mucho más flexible, incluyendo encriptado, autentificación y transformación de datos.

Flamenco Networks persigue los mismos objetivos que Grand Central pero con una filosofía P2P (peer to peer o de tú a tú) similar a la del famoso Napster: mediante un pequeño programa residente en los ordenadores de sus clientes, éstos pueden interconectarse directamente entre sí para el intercambio de información, bajo la supervisión de la consola principal del sistema, que audita los procesos y garantiza su seguridad y autenticidad.

Conclusiones

La frenética actividad de la industria del software en torno a Internet permite aventurar que se aproxima una nueva era para las aplicaciones de los sistemas de información. Tras el periodo comprendido entre 1995 y 2000, en el que las expectativas superaron a la realidad, ha llegado una etapa de revolución silenciosa en la que la Red se perfila como la piedra angular de las aplicaciones del siglo XXI.

Es más que posible que conforme la disponibilidad y el ancho de banda de Internet sean comunes, las aplicaciones informáticas se entiendan cada vez más como un “puzzle” multivendedor de servicios suministrados desde la Red y perfectamente encajados, con la finalidad de conseguir la máxima funcionalidad posible, al precio más ajustado y en el menor plazo de tiempo.

Como periódicamente ocurre en la industria del software y en referencia a VISICALC (la primera hoja electrónica), con una mención obligada a Lotus Notes como la primera aplicación de trabajo en grupo y a SAP como el inventor “oficial” de los ERP, cabe esperar, en este todavía confuso mercado de los servicios web, la aparición de una killer application, o literalmente una “aplicación matadora”, que sepa encontrar las claves sobre lo que el mercado pretende recibir de esta tecnología.

Existe pues una clara oportunidad para la definición de unos nuevos líderes en un campo que acercará definitivamente Internet a las operaciones de las empresas y la convertirá en un factor imprescindible para su funcionamiento.

Carmelo Pérez, análisis y desarrollo de aplicaciones intranet & Internet carmeloperez@asesor-internet.com / www.asesor-internet.com