Chile, el enlace sudamericano con Asia-Pacífico

02 abr 2002

Los puertos chilenos están en proceso de modernización para que el país pueda llegar a ser la principal región de la costa oeste de América del Sur con salida hacia el área de Asia-Pacífico. El tráfico portuario nacional ostenta un crecimiento estimado del 6% anual y en 2002 está proyectada la transferencia de 29,2 millones de toneladas de mercancía en general a Estados Unidos, Italia o Argentina, un 26% más que en los últimos cuatro años.

Chile mira hacia el mar, pero también hacia el futuro. En Valparaíso y en otros puertos importantes del país se están llevando a cabo reformas e inversiones con el objetivo de posicionarse como las infraestructuras más capacitadas de Sudamérica para comerciar con los mercados asiáticos. Los centros portuarios que se ubican a lo largo de sus 4.200 km de costa son un eje de negocio y desarrollo para el siglo XXI, al igual que los puertos más característicos de Japón, Canadá, Estados Unidos y Australia.

El país crece en Latinoamérica como un caso extraño, aislado, pero sobre todo sólido. Las reservas internacionales cubren la mitad de la deuda externa de Chile mientras que en la mayoría de los estados del sur del continente esto sucede sólo en un 25%. Además, según la agencia de calificación financiera Standard and Poor´s, a pesar del significativo deterioro de la economía global chilena, la Administración podrá mantener su sólida política macroeconómica y fuerte posición fiscal.

Después de más de una década de crecimiento y de que se duplicara el ingreso per cápita, la economía se consolida y se abre cada vez más a los mercados extranjeros. Actualmente, Chile ocupa el primer lugar en América Latina en inversión en telecomunicaciones: ostenta el mayor índice de suscripción a servicios de teléfonos móviles de la región, —15 de cada 100 habitantes tiene un móvil— y despliega una destacada presencia de ordenadores personales conectados a Internet.

También es la puerta de acceso y salida de los principales proyectos de fibra óptica llevados a cabo en Latinoamérica (Atlántica-1, SAC, SAM-1 y Emergía). De este modo, el país ha creado una nueva plataforma de negocios y se ha transformado en un enclave óptimo para la localización de centros de desarrollo de alta tecnología, donde las variables económicas, geográficas y de calidad de vida también permiten el incremento de actividades científicas y comerciales.

Comercio con el mundo

Desde que en 1996 firmó un pacto de cooperación con la Unión Europea, Chile planea suscribir un tratado de libre comercio con Europa, que probablemente se hará efectivo el próximo mes de mayo en Madrid. Asimismo, Estados Unidos es uno de los principales socios del país con un intercambio comercial que bordea los 8.100 millones de euros al año, aunque todavía no ha podido establecerse un acuerdo concreto entre ambos.

No obstante, mantiene convenios con sus vecinos del Mercado Común del Sur (MERCOSUR) y con México, Canadá y Corea y es miembro del Foro de Cooperación Económica del Asia-Pacífico (APEC) integrado por Australia, China, Estados Unidos, Hong Kong, Indonesia y Japón, entre otros.

La inversión de capitales extranjeros en 2001 alcanzó un total de 6.300 millones de euros, casi un 50% más que en el año 2000. Los fondos provinieron principalmente de Estados Unidos (37,1%), Italia (19,4%), Australia (9,1%) y España (8,3%). Por otro lado, la mayor parte de las exportaciones —que alcanzaron en 2000 un valor de 20.000 millones de euros— es transportada a los puertos en camiones que se desplazan por la estrecha anchura del país.

Justamente, por la eficiencia con que maneja sus superficies portuarias, Chile es uno de los 40 países que forman parte del consejo consultivo de la Organización Marítima Internacional (OMI), organismo de las Naciones Unidas que agrupa a 160 estados y la principal entidad en el ámbito mundial que rige la actividad marítima.

Dentro de este mismo ámbito, se estima que el tráfico portuario crecerá en un 6% anual. Sin embargo, fuentes privadas mantienen que esa cifra alcanzará el 10%. Para 2002 está proyectada la transferencia de 29,2 millones de toneladas, que representarían un aumento del 26% en los últimos cuatro años.

También se prevé que la mayoría de los puertos chilenos sean privatizados, aunque muchos de ellos ya están insertos en planes de inversión y modernización bajo el respaldo de capitales privados, en muchos casos extranjeros.

Valparaíso, eje de proyectos

Valparaíso, el puerto más relevante de Chile, está viviendo una etapa de renovación, reactivación y perfeccionamiento tecnológico. La región donde se encuentra ha recibido una inversión de más de mil millones de euros, únicamente destinada al desarrollo portuario.

Valparaíso posee una localización estratégica: se encuentra a sólo 120 km de Santiago, la capital del país y uno de los centros financieros más notables de América Latina, y a menos de una hora del aeropuerto internacional. Es el principal puerto de mercancía en general para comercio exterior, la ciudad-puerto mejor equipada y dispone del mayor volumen y experiencia en transferencia de carga hortofrutícola de Chile.

Hoy día, es considerado la puerta central de América del Sur para las comunicaciones comerciales con la zona de Asia-Pacífico porque es el más desarrollado de la costa oeste. De cara al futuro, está proyectada su transformación en un centro integral de negocios, además de atender buques, carga y pasajeros.

"“El concepto tradicional que ha perdurado por mucho tiempo en Chile es que los puertos son instalaciones destinadas básicamente a la transferencia de carga entre los barcos y los muelles”", explica Gabriel Aldoney, presidente de la Empresa Portuaria Valparaíso (EPV). "“Sin embargo", —añade—, "esta idea ha ido quedando atrás por el interés de reducir los costos de la cadena logística completa. Nada se obtiene con tener puertos eficientes y con bajos costos si a su alrededor no ocurre lo mismo".

"Las dependencias portuarias modernas no son empresas cerradas en su actividad, sino que se erigen como ejes de desarrollo que benefician al entorno, características estas propias de un centro de negocios”". Para llevar a cabo este proyecto de renovación se han efectuado licitaciones de espigones y muelles con el objetivo de generar un puerto granelero limpio y sin impactos negativos en la costa.

También se ha cambiado definitivamente el rostro al barrio del puerto para impulsar el desarrollo inmobiliario y turístico en el área. Todos estos avances han permitido una mejora, por ejemplo, en la transferencia de carga. En 2001, Valparaíso registró un crecimiento de 13,7% con relación al año 2000. Los 4,5 millones de toneladas manipuladas el año pasado superaron ampliamente los 3,9 millones del ejercicio anterior.

No obstante, las instalaciones están preparadas de cara al futuro, ya que la capacidad de transferencia actual es de 7,3 millones de toneladas al año, lo que supone la posibilidad de mover más de 500.000 TEU. Entre las infraestructuras portuarias destacan los seis remolcadores y las siete grúas con diversas funcionalidades. Además, cabe citar que este puerto ostenta un alto índice de seguridad de la carga: ha reportado cero siniestros en los últimos dos años.

Para la temporada hortofrutícola, el puerto de Valparaíso cuenta con un antepuerto o superficie terrestre que permite coordinar de forma anticipada y eficiente los procesos y flujos asociados a la manipulación de la mercancía, gracias a la capacidad de aparcamiento de 240 camiones y a su sistema de información.

Tras la incorporación de este antepuerto se logró disminuir en un 35% los tiempos de las operaciones en las últimas tres temporadas. La espera para embarcar la carga de un vehículo que transporta 20 t de productos hortofrutícolas ocupa hoy un poco más de 11 horas y media, seis menos que en 1999. Si la mercadería va en contenedores, el tiempo de la operativa es inferior en tres horas al empleado el año pasado.

Por otra parte, el gobierno está a cargo del proyecto del nuevo acceso al puerto del que ya existen dos etapas concluidas y se trabaja en una tercera. Se trata de una propuesta que, terminada en 2005, generará un acceso a Valparaíso que aliviará enormemente la congestión que provoca actualmente la gran cantidad de camiones que circula por la superficie portuaria.

En el primer semestre de 2002, finalizarán además las obras de construcción de un muelle especializado para cruceros y una nueva terminal. El objetivo es renovar la costa y aumentar las potencialidades turísticas de la ciudad. Así, Valparaíso podría ser también el principal puerto latinoamericano de atraque de buques de pasajeros.

Precisamente, una de las características que hacen que ostente el cargo de “el puerto” de Chile está relacionada con la cantidad de embarcaciones que recibe. Más de mil barcos de carga utilizan sus muelles cada año y también miles de toneladas de frutas —las uvas y las ciruelas, junto al cobre, son las principales exportaciones del país— se despachan aquí con destinos como Estados Unidos, Europa y el área de Asía-Pacífico.

Se estima que en plena temporada de exportación hortofrutícola se mueven cerca de diez millones de cajas de productos de este tipo. Si las iniciativas se concretaran, Valparaíso sería en cierto modo similar a las ciudades europeas, que por una parte preservan el casco antiguo y, por otra, consolidan un sector que dispone de elementos modernos y un enclave de emplazamiento de actividades administrativas, productivas, comerciales y logísticas.

Fuente: Johana Kunin, colaboradora


La gestión virtual de la carga en Valparaíso

Uno de los avances logrados con la modernización del puerto chileno de Valparaíso fue el lanzamiento del portal Valparaíso Logistic Trade (www.vlt.cl), un sistema on-line de información integrada de las operaciones de comercio exterior para la gestión logística de la carga. Hoy día, genera ahorros de unos 2,9 millones de euros anuales para los clientes de las instalaciones portuarias.

Desde este portal se accede a distintas opciones de interés como la planificación naviera, la citación de la carga, la inscripción para la retirada de contenedores, la solicitud de camiones para el embarque, el seguimiento de los vehículos en ruta y en el puerto, el estado de la carga o estadísticas hortofrutícolas, entre muchas otras.

También es posible la integración y coordinación con los exportadores, productores, embarcadores, agentes de aduanas, empresas navieras y transportistas. Gracias a este modo gestión, se puede disminuir el tiempo de estancia de los camiones en el puerto, el del embarque y estacionamiento de los buques, reducir la espera y optimizar el flujo de la flota terrestre y del espacio disponible en el recinto portuario.



PUERTO DE VALPARAÍSO, descripción física

  • MUELLES DE ATRAQUE: 10
  • LONGITUD TOTAL DE LOS MUELLES: 2.005 m
  • AGUAS ABRIGADAS: 50 ha aprox.
  • PROFUNDIDAD MÁXIMA DE LOS MUELLES: 12 m
  • CALADO AUTORIZADO MÁXIMO: 11,4 m
  • ÁREAS DEL PUERTO CUBIERTAS: 42.872 m2
  • ÁREAS DEL PUERTO DESCUBIERTAS: 250.572 m2



Los puertos chilenos del norte y del sur también se modernizan

Actualmente, Antofagasta es el principal puerto del norte de Chile, pero se prevé que en octubre de 2003 la superficie portuaria de Mejillones, localizada en lal misma área, lo superará en tecnología y desarrollo. El proyecto del lanzamiento del enclave de Mejillones ha supuesto una inversión inicial de 138 millones de euros, que fueron aportados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

El plan, cuyas obras comenzaron el año pasado, contempla la construcción por fases de cinco terminales de carga general y contenedores, otra terminal para los productos sólidos y una tercera para líquidos, además de toda la red vial y ferroviaria que facilitará la operativa en el puerto y en las zonas industriales aledañas.

Su capacidad de transferencia está estimada en dos millones de toneladas al año y el resultado será un puerto moderno, diseñado para el comercio de mercancías en general y, principalmente, de cobre. En consecuencia, supondrá un enorme potencial de desarrollo para la zona norte de Chile y su industria minera.

Asimismo, el puerto de Punta Arenas, localizado en el extremo austral de Sudamérica, se encuentra estratégicamente ubicado en el corredor bioceánico natural del estrecho de Magallanes. En ese área se unen los océanos Pacífico y Atlántico Sur y, además, es la puerta de entrada al continente Antártico.

Actualmente, sirve a los buques mercantes que realizan tráfico de cabotaje con el centro del país, naves de línea que transportan mercaderías de importación, embarcaciones científicas con operaciones en la Antártida, grandes cruceros de turismo y flotas pesqueras que operan en la zona.

La Autoridad Portuaria Valenciana está en proceso de negociación para participar en la modernización y ampliación de este puerto austral chileno. Ambas partes tienen buenas perspectivas para el proyecto ya que, por ejemplo, los españoles gozarán de importantes bonificaciones que pueden llegar al 20% del total de las inversiones.